Identifican nuevos genes asociados al trastorno bipolar
La genética servirá en corto plazo para mejorar el diagnóstico y el tratamiento del trastorno bipolar y de muchas otras enfermedades mentales
Científicos internacionales con importante participación española, consiguió identificar nuevos genes asociados directamente al trastorno bipolar, una patología psiquiátrica grave caracterizada por los recurrentes y cambiantes episodios.
Detectaron que la carga hereditaria presente en los genes puede ser tan determinante como los factores ambientales en esta enfermedad, según los investigadores, entre los que se encuentran científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental CIBERSAM.
La causa última de la bipolaridad se desconoce, aunque los datos de los estudios sugieren que se trata de una patología asociada tanto a factores ambientales como a genéticos y a la interacción de los unos con los otros.
La investigación se fijó como objetivo identificar nuevos lugares en donde su ubican los genes asociados a ese trastorno y para ello se utilizaron los datos de un total de 20.352 personas bipolares y 31.358 personas sanas de 14 países de Europa, Norteamérica y Australia.
El estudio, cuyas conclusiones publicó la revista “Nature”, revela que existen treinta de esos “lugares” directamente relacionados con la bipolaridad, veinte de los cuales no se habían identificado hasta ahora.
La investigación reunió a científicos de varios países que forman parte del Grupo de Trabajo del Trastorno Bipolar del Consorcio Internacional de Genómica Psiquiátrica, entre ellos varios investigadores del CIBERSAM de los departamentos de psiquiatría de los hospitales Clinic y Vall d’Hebron de Barcelona.
Los científicos confirmaron la conexión que existe entre esos lugares donde se ubican los genes asociados al trastorno bipolar y los genes que codifican los canales de calcio, por lo que los investigadores destacaron el potencial que pueden tener los fármacos antagonistas de los canales de calcio como terapia para combatir esta enfermedad.
El director científico del Cibersam, Eduard Vieta, subrayó que el estudio logra identificar genes de riesgo “y por lo tanto los avances terapéuticos, algunas de ellas inexploradas hasta ahora”, y que el trabajo abre la puerta para investigar la eficacia de nuevos fármacos que se dirijan a esas terapias.
Eduard Vieta, jefe del Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clinic de Barcelona, pusó acento en la dificultad de diagnosticar y diferenciar este tipo de trastornos; “sus fronteras, tanto con la normalidad como con otras patologías psiquiátricas, son borrosas”.
El director científico del Cibersam lamenta la ausencia de pruebas complementarias que permitan la verificación y diferenciación de este tipo de trastornos, y aunque a su juicio se ha progresado “muchísimo” en las últimas décadas, ese progreso se ha trasladado de una forma muy lenta a la práctica clínica debido precisamente a que son enfermedades estigmatizadas.
Eduard Vieta está convencido de que la genética va a servir a corto plazo para mejorar el diagnóstico y el tratamiento del trastorno bipolar y de muchas otras enfermedades mentales, pero también de que los avances científicos “probablemente mejorarán el pronóstico de la enfermedad para algunos, pero no para todos”, debido a las diferencias que existen por ejemplo entre países ricos y pobres.
“Cada día estamos más cerca de ello; el reto es avanzar en investigación y en la aplicación de los avances científicos y educar a los profesionales para que los utilicen apropiadamente”.