Tuve sexo durante la pandemia de Covid-19
En historias de la pandemia…
por Bernardo Moreno y Patricia Retana
Respetuoso de las medidas de sana distancia y sobre todo del “quédate en casa”, a partir del inicio de esta contingencia por Covid-19 yo no había tenido sexo con nadie, incluso cancele el plan que tenía con ese personaje guapísimo con quien platico en Grindr desde hace semanas.
Nuestras charlas siempre fueron divertidas repletas de “nudes” y de links de nuestros vídeos pornos favoritos; por lo que terminábamos con la ansiedad de vernos y obvio tener sexo. Luego llegaron las notas en whatsapp diciendo que queríamos hacer de todo cuando nos viéramos.
Pasaron semanas y aún no nos veíamos. Las cosas se ponían más graves en el país y no parecía que la cuarentena fuese a acabar pronto, conforme pasaba el tiempo, él y yo nos traíamos más ganas. Al fin me dijo que vivía solo, y llevaba ya dos semanas sin salir de su casa, que no había problema por eso del coronavirus.
La verdad, yo sí estaba preocupado porque vivía con una roomie y además quería mantenerme sin riesgo de contagio para poder ver a mis papás que ya están grandes. Yo no sabía qué hacer. Le pregunté a mi roomie si tenía problema en que yo fuese a tener sexo con él.
¿Lo conoces desde hace mucho tiempo? ¿Es amigo tuyo? ¿Confías en que no ha visto a nadie como dice? no quiero que me pongas en riesgo, yo estoy tratando de cuidarme y no veo nadie, trabajo desde casa, como sabes compramos todo en línea y por lo que dicen el virus se transmite por gotitas de saliva o de mocos que salen cuando hablas o estornudas, imagínate, si vas a andar besándote con alguien.
Luego, el tener sexo implica tocarse, seguro que la posibilidad de contagio de Covid-19 es mucho mayor. No lo sé, no estoy segura. Creo que prefiero que nos esperemos al menos un mes para este tipo de cosas.
Yo sabía que mi roomie tenía razón, pero le traía muchas ganas a este tipo. Le escribí entonces a un amigo médico y directo le dije:
Quiero ir a coger con un wey que me encanta pero no sé qué hacer, ya pasaron dos meses y me cansé de solo masturbarme. Dice que no ha visto a nadie en dos semanas y que no ha tenido síntomas de Covid-19. Pero no sé si confiar en lo que me dice. Además, mi roomie no quiere que vaya. Si voy sin decirle y acaba contagiándose después me voy a sentir super mal. Además, aunque dicen que a la gente de nuestra edad nos da sólo una gripa, ¿qué tal que sí me da fuerte?
Mi amigo médico me respondió algo que yo ya esperaba.
No puedes confiar en lo que el tipo te dice. En toda epidemia tenemos que actuar como si tanto la otra persona como uno mismo tuviera la infección. Si vas a ir a tener sexo con él, debes ser responsable y, número uno, decirle a tu roomie lo que vas a hacer. Porque su bienestar depende del tuyo ya que viven juntos. Si ella está de acuerdo y vas a tener sexo con él, debes tú también asegurarte de no haber visto a nadie en dos semanas y de no haber presentado síntomas de Covid-19. Es tu deber también cuidarlo a él de no contagiar. Los síntomas ya sabes cuáles son, dolor de cabeza, fiebre, tos, escurrimiento nasal, dolor de garganta o diarrea. Con que uno solo se presente, debes de sospechar Covid-19. Ahora, si ya de plano vas a ir con él, date un baño antes y lávate las manos bien antes de empezar a tocarse. Tampoco está de más bañarse después de terminar el sexo.
Ah, y obviamente no olvides usar condón. Por andar preocupándote del coronavirus te vayas a olvidar de que existen el VIH y otras ITS de las que debes protegerte.
Después de un tiempo, el tipo y yo ya bajamos la intensidad en los mensajes, mi roomie me dijo que, si quería ir a tener sexo, podía hacerlo, porque ella se iba a ir a pasar varias semanas a casa de sus papás para cuidarlos. Entonces le escribí a mi cita y al final acordamos vernos el día siguiente. Hicimos todo lo que me recomendó mi médico y amigo, pues ya lo habíamos negociado antes. La verdad es que el sexo fue buenísimo.
Las siguientes dos semanas fui aún más estricto con los cuidados en cuanto a posibles síntomas Covid-19. Les inventé a mis papás que ese fin de semana no podía ir a verlos porque tenía muchísimo trabajo, aunque en realidad quería protegerlos ante la duda de ser asintomático. Además, me compré varios cubrebocas para no quitármelo en ningún momento de los pocos que salía por comida o al banco.
Por lo pronto, me quedé tranquilo que tanto mi ligue como yo redujimos el riesgo lo más posible y que no puse en riesgo a nadie más. La verdad sí pienso tener sexo de nuevo en estos meses, pero sé que tengo que seguir estos cuidados, porque nuestra vida solo tiene que modificarse en ciertos hábitos saludables que al fin se volverán cotidianos y formarán parte de la #nuevanormalidad.