Virgen de Guadalupe y las peregrinaciones como la oportunidad de cumplir

El Centro de Opinión Pública de la Universidad del Valle de México llevó a cabo el estudio «En el día de la Virgen de Guadalupe, las peregrinaciones son vistas como la oportunidad de cumplir una promesa» en el contexto del día de la Virgen de Guadalupe, donde reportan que el 35 por ciento de los mexicanos considera que esta es la celebración religiosa más importante en el país.

Durante la entrevista numerosas expresiones de fervor guadalupano, como las peregrinaciones llegadas a la Basílica durante todo el año, y en particular, aquellas que se dan cita el 11 y 12 de diciembre.

Al respecto, de acuerdo con la encuesta Expresiones públicas y privadas de la religiosidad en México, el 83 por ciento entiende a las peregrinaciones como una expresión de fe, mismo porcentaje las ve como el cumplimiento de una promesa y 71 por ciento lo relaciona con viajes a un templo o lugar sagrado.

La mitad de los entrevistados señala que las peregrinaciones son una oportunidad para que las comunidades ubicadas en el paso muestren su fraternidad; no obstante, el 64 por ciento nunca ha dado algún alimento, bebida u otra ayuda a los peregrinos, 26 por ciento lo hizo en una ocasión y 10 por ciento comenta que en varias ocasiones ha brindado alguna ayuda a peregrinos.

En esta fecha, 32 por ciento suele acudir a una misa o encender una vela para la Virgen de Guadalupe, 34 por ciento ve o asiste a las llamadas “Mañanitas”. La frecuencia de estas prácticas se incrementa cuando son realizadas a nivel familiar, 48 por ciento (acudir a misa y encender veladora) y 52 por ciento (ve o asiste a las Mañanitas).

Creencias y diversidad

Creyentes o no, católicos o no, 95 por ciento ve a un México devoto de la Virgen de Guadalupe (79 por ciento indica muy devoto y 16 por ciento devoto). 48 por ciento estima que esta devoción ha crecido, 38 por ciento considera que se mantiene igual, pero 14 por ciento nota disminución.

Si bien, la llamada Morenita del Tepeyac tiene un lugar especial entre los mexicanos, en la riqueza cultural del país coexisten otras figuras, por ejemplo 89 por ciento cree que México es devoto de San Judas Tadeo (42 por ciento muy devoto y 47 por ciento devoto), fervor que ha incrementado en los últimos años según la percepción de un 53 por ciento. Destaca que el mayor crecimiento se ve en la devoción por la Santa Muerte (61 por ciento).

Vivir en un entorno diverso al amparo de la libertad de creencias permite creer en la Virgen, en Santos, en Dios, en ángeles, en un Ser superior, en la Muerte, o bien, no creer. Así mismo, permite tener una religión, vivir siguiendo sus preceptos o tenerla sin cumplir al pie sus lineamientos. Por ejemplo, 61% cree indudablemente en la existencia de Dios, 26 por ciento cree en él, aunque tiene algunas dudas y de estos más de un tercio son jóvenes entre 18 a 24 años. Y, si bien, a 80 por ciento sus padres le inculcaron una religión durante la infancia, solo 57 por ciento sigue las creencias religiosas con las que fue educado.

¿Religiosidad a la baja?

9 de cada 10 personas piensa que México es un país religioso (40 por ciento lo cree muy religioso, 50 por ciento religioso) y valora crecer dentro de una religión, es así que, 72 por ciento reconoce que es importante educar a los niños y las niñas en un culto; tal relevancia se acentúa en función de la religión que se tenga, por ejemplo, para los católicos es de 83 por ciento y es de 95 por ciento para las bíblicas y; por edad el tema es menos relevante para el grupo de 18 a 24 años.

Sin duda, el acercamiento de la población más joven a la religión está siendo un reto, solamente 21por ciento cree que los jóvenes están interesados en mantener las costumbres religiosas en el país. 64 por ciento externa que a las generaciones más jóvenes de su familia les cuesta trabajo participar o integrarse a las costumbres religiosas; por lo que corresponde a las Iglesias, 39 por ciento percibe que estas tienen estrategias para acercarse a la población infantil y juvenil.

La Iglesia en el México de hoy

En un contexto donde todo cambia apresuradamente ¿dónde creemos que están las Iglesias? ¿las vemos estáticas? 71 por ciento piensa que las Iglesias necesitan modernizarse para estar acorde con la sociedad, pero ¿a qué llamamos modernizarse y ¿nos agradarían esos cambios? Sin duda, las Iglesias han hecho modificaciones e incorporado nuevos mecanismos, por ejemplo, podemos ver líderes religiosos predicando en redes sociales como Tik Tok, hecho que desaprueba 55 por ciento; solo 35 por ciento aprueba oficiar ceremonias religiosas en línea, 23 por ciento está indeciso y 42 por ciento lo desaprueba. 46% desaprueba que cantantes, grupos o bandas interpreten música religiosa o con mensajes religiosos, 30 por ciento lo aprueba y 24 por ciento está indeciso. 70 por ciento desaprueba las cadenas de oración enviadas por WA, 73 por ciento desaprueba que canales de televisión ofrezcan productos religiosos y 75 por ciento rechaza ver en televisión a personas dando testimonio de un “milagro” o “sanación”.

Otros temas que también generan desaprobación es la intervención de los líderes religiosos al hablar de temas políticos (58 por ciento) o económicos (50 por ciento). Pero hay mayor aceptación al tratarse de temas sociales, donde 46 por ciento está a favor de ello e incluso 58 por ciento considera que los líderes religiosos podrían correr riesgos si se pronuncian en asuntos del crimen organizado.    Con una población diversificada en sus creencias: desde fieles creyentes hasta personas sin religión, es claro que México sigue viéndose como un país devoto, con prácticas inculcadas y preservadas por muchas familias; es un país donde 7 de cada 10 reconoce que la religión da consuelo a las personas y para 71 por ciento su fe en Dios le ha ayudado a salir adelante en los momentos difíciles.